INSOMNIO / FINALES NBA.
Este enunciado es sencillo.
¿No duermo porque veo las finales? ¿Veo las finales porque no
duermo?
Desde muy joven
las finales de la NBA fueron mi pecado en época de exámenes. Siempre de
madrugada, siempre en junio, siempre calor. Una buena siesta para aguantar
estudiando hasta las tres de la madrugada y luego partidito. El día siguiente
arrastrando.
Hace años que los
exámenes me abandonaron, el día siguiente ya no es de agenda libre y la
madrugada pasa factura. Pero aún así recuerdo pocos año en que no haya
visto en directo el partido decisivo o lo haya intentado.
Mientras escribo
estas líneas veo en directo como Lebron James se dispone a ejecutar su destino.
Hace un año en este blog le di un repasito. Por cobarde. Sigo pensando que se
ha negado a si mismo la posibilidad de ser el mas grande. Al menos uno de esos
poquísimos. Si nada lo remedia en un par de horas será campeón. Y se lo merece.
Pero será campeón en el equipo de Wade, eso no lo podrá cambiar.
Delante hay otro par de jugadores de dibujos animados Westbrook
& Durant, pero este dúo es distinto, han hecho crecer juntos su equipo.
Algo así como Thomas y Dumars, Bird y McHale, Stockton y Malone. Creo que este
par hará mas y mejor historia si siguen juntos. Ya veremos.
Pero ese no era el tema, era otro. A las once de la noche, cuando
me caí en la cama y me parecía no sería capaz de responder al despertador por
la mañana, yo no recordaba que se jugaba esta noche, ni sabía a que hora, ni
como iba la final. Tenía desconectado el modulo baloncesto. Lo que ha pasado es
que hace calor, joder que calor, he puesto la tele y que me he encontrado con
la final de la NBA. Pues vale, total no tengo sueño.
Y seguramente los últimos años (salvando quizás las finales de
Gasol) he visto las finales porque acompañaban mi insomnio. Así que, a lo
mejor, lo que pasa es que me acostumbré a esta rutina/liturgia/frikada y no hay
manera de salir. Realmente la putada son los días de insomnio sin NBA, y parece que de momento termina esta noche.
Y ojo, Lebron es muy muy bueno.